La Legitimación de la Autoridad Docente

Título

La Legitimación de la Autoridad Docente

Descripción

Artículo

Autor

María Florencia Conforti

Editor

Mariana Schenone
Tania Gil

Fecha

Mayo 2018

Idioma

Español

La Legitimación de la Autoridad Docente


María Florencia Conforti
Sociedad, Política y Educación – Universidad Torcuato Di Tella 2017
@florconforti1


Abstract
El propósito del presente trabajo es analizar la legitimación de la autoridad del maestro a lo largo de la historia.  Se analizará la transición de la legitimidad de origen hacia la legitimidad de ejercicio comparando la sociedad postfigurativa con la prefigurativa (Mead, 2002).  Muchos de los problemas de las escuelas no obedecen solamente a políticas educativas, sino que están relacionadas a una nueva configuración de la sociedad.  Cabe destacar que, así como la escuela no fue un invento, sino que se fue construyendo con el paso del tiempo, la autoridad del maestro y su lugar de saber también han ido mutando.  Se tomarán como eje algunos conceptos y dispositivos que darán marco a la comparación antes mencionada.
En primer lugar, se abordará el concepto de asimetría en relación al dispositivo infancia y a los adultos para intentar entender cómo impacta la crisis de la jerarquía de la infancia (Postman, 2011) en el lugar de autoridad del maestro.
En segundo lugar, se tomará la tecnología de instrucción simultánea para ver cómo el esquema asimétrico que estaba tan bien constituido permitía que cualquiera que ocupe el lugar del docente tenga legitimidad de origen.  Dicha legitimidad se daba por estar en un determinado lugar y, en algunos casos, podría darse por lazos de sangre o lugar de poder.
Por último, se analizará la sociedad en la actualidad y cómo el docente legitima su autoridad en la cultura prefigurativa. En comparación con el mundo adulto de la sociedad postfigurativa, en la que el adulto se autogobernaba, tenía la capacidad de educar a otros y podía decir “no” de forma legítima y confiable, el adulto prefigurativo, quien no valora el sacrificio sino los logros a corto plazo, se encuentra con que su “no” tiene un costo ético muy alto pues supone una mínima coherencia moral.  También tiene un costo emocional ya que supone postergar cierta satisfacción (por ejemplo, cuando los niños se enojan o lloran).
Realizando este recorrido histórico desde la sociedad postfigurativa hacia la prefigurativa se puede ver cómo los niños y los adultos han ido cambiando y cómo dicha mutación ha provocado una inevitable modificación en la escuela, en el lugar del maestro en relación al saber y en la autoridad del docente frente a los niños y sus familias.

Palabras clave: postfigurativa, prefigurativa, maestro, legitimación, autoridad


Para comenzar el recorrido histórico que permitirá dar cuenta del pasaje de la legitimidad de la autoridad docente de origen a la de ejercicio, es necesario describir la sociedad del pasado en comparación a la actualidad. Este contexto dará el marco necesario para comprender los cambios en el lugar del maestro frente a su autoridad.
La sociedad y sus cambios
Pasado y presente. Cambios lentos. Cambios abruptos. Comunidades pequeñas. Comunidad Mundial. Al analizar las modificaciones que ha ido viviendo la sociedad a través de la historia es imposible no enfocarse en las dos caras de la moneda. Si bien entre la sociedad del pasado y la presente ha habido una transición, es ineludible la necesidad de describir sus características tan interesantes como opuestas.
La sociedad postfigurativa
En palabras de Margaret Mead (2002) la sociedad postfigurativa se caracterizaba por el traspaso de saberes de los adultos hacia los niños. Era una sociedad en la que los cambios eran lentos y suaves, y en la que “el pasado de los adultos es el futuro de cada nueva generación” (Mead, 2002, p. 35). Cabe destacar que para que exista la cultura postfigurativa es necesaria la presencia de por lo menos tres generaciones y “su continuidad depende de los planes de los ancianos y de la implantación casi imborrable de dichos planes en la mente de los jóvenes” (Mead, 2002, p. 39).
La sociedad postfigurativa se caracteriza por tener una fuerte relación con su entorno o hábitat, aunque no necesariamente se tratase de un mismo lugar, tal es el ejemplo de las poblaciones nómades. Otro aspecto importante a destacar es la existencia de ciertos factores que pueden influir negativamente en el traspaso de saberes: la confiabilidad en la memoria de lo conocido y la presencia de nostalgia o idealización en los relatos de los ancianos.
La sociedad prefigurativa
Al contrario de en la cultura postfigurativa, en la sociedad prefigurativa se destaca una gran rapidez en los cambios. Los avances tecnológicos son muchos y de alto impacto y generalmente lo aprendido se vuelve obsoleto en un corto lapso de tiempo. Aparece la noción de comunidad mundial e interrelacionada: “los acontecimientos que se registran en un punto de la tierra están inmediata y simultáneamente al alcance de los pueblos que habitan todo el resto del mundo” (Mead, 2002, p. 101).
La brecha generacional entre jóvenes y adultos se amplía y éstos comienzan a delegar su autoridad. Por ejemplo, los adultos envían a sus hijos a la escuela para que los maestros les enseñen. Mead (2002) sostiene:
En el sentido más profundo los adultos continúan empuñando hoy el timón, como lo empuñaban ayer. Y en parte porque empuñan el timón, no comprenden que todavía no existen las condiciones imprescindibles para entablar un nuevo diálogo con los jóvenes. (p. 111)
Esta nueva configuración de la sociedad en la que claramente se notan diferencias con la sociedad postfigurativa contribuyó a la transformación de la legitimidad de la autoridad docente.
Infancia y Asimetría
La infancia se concibe como un cuerpo dependiente y heterónomo con la presencia de la idea de carencia y vulnerabilidad. Los niños carecen de poder de conducirse de manera independiente y la falta de juicio moral autónomo, conlleva a la idea de ternura (necesidad de cuidarlo y protegerlo). La historia de la infancia es la del vínculo asimétrico entre adulto y niño. La asimetría es un instrumento para una futura emancipación y para lograr el futuro autogobierno. 
Sin embargo, Postman (2001) sugiere la desaparición de la infancia ya que al estudiar el cambio tecnológico que introduce la televisión en la sociedad prefigurativa, él demuestra que la asimetría ya no está dada entre adultos y niños, sino entre el televisor y los televidentes. Adultos y niños pueden ver los mismos programas y tener acceso a los mismos contenidos y fuentes de información, por ende, la relación entre ellos se vuelve equivalente. Es en la cultura prefigurativa en la que aparece el colapso de la jerarquía de la infancia. Siguiendo esta línea, Narodowski (2016) señala una nueva lógica jerárquica: la asimetría de la modernidad, en la cual la relación entre niños y adultos se resume a “la minoría de edad que lleva ineluctablemente a la mayoría de edad” (p. 90).
Mundo adulto y autoridad
Como ya se ha descripto anteriormente, el adulto de la sociedad postfigurativa era quien poseía el saber y era el encargado indiscutido de transmitirlo a los niños. Los adultos eran también quienes imponían la ley a los niños y eran éstos quienes debían obedecerlos. El simple hecho de ser adulto bastaba para ocupar el ineludible lugar de autoridad y orden frente al niño.
Sin embargo, el adulto de la sociedad prefigurativa ya no se presenta como ley o ejemplo a seguir por los niños. Narodowski (2016) afirma que “los adultos niegan su propia adultez. No hay responsabilidad en la creación de valores morales y el cuidado del otro no-adulto se reduce a evitarle los peligros” (p. 109). Como se desarrollará más adelante, la figura del adulto prefigurativo tiene un alto impacto en la legitimación de la autoridad del docente.
La instrucción simultánea y la legitimación de la autoridad docente
En la tecnología de instrucción simultánea existe una relación asimétrica entre el docente y sus alumnos. Esta asimetría le permite a la instrucción simultánea vigilar cuerpos: la mirada del docente atraviesa la mirada de los otros. Se impone disciplina sobre los cuerpos y sobre lo que se puede saber o no (disciplina epistémica). El docente también está vigilado al mismo tiempo. Por la asimetría que existe en esta tecnología, cualquiera que ocupe el lugar del maestro tendrá legitimidad de origen. Sin embargo, el docente prefigurativo debe constituir su legitimidad de manera cotidiana. En la sociedad prefigurativa ya no existe la legitimidad de origen, sino que se pasa a la legitimidad de ejercicio. Narodowski (2016) agrega:
En este sentido, las equivalencias se han universalizado y la autoridad ya no es por la marca de su origen, sino que en el mejor de los casos habrá de legitimarse por la significatividad que encierra su ejercicio: una legitimidad siempre situacional y pasajera. (p. 183)
Martínez Boom (2016) sostiene que “el maestro no es una invariante en la historia, no hay por tanto una figura eterna llamada maestro preexistente a las relaciones que lo constituyen” (p. 34). Por este motivo, al alterarse la relación asimétrica que existía en la sociedad postfigurativa, el cambio del maestro en la sociedad prefigurativa es ineludible.
Conclusión
Se puede concluir que el cambio en la legitimación de la autoridad docente se debe principalmente a una nueva configuración de la sociedad que introdujo cambios en los adultos que, inevitablemente, impactaron en los niños y su enseñanza. La siguiente tabla intenta resumir los conceptos abordados en el presente trabajo:

 

Sociedad Postfigurativa

Sociedad Prefigurativa

Características

Transmisión de saberes de adultos a niños. Cambios lentos. Existencia de por lo menos tres generaciones vivas.

Cambios rápidos y grandes avances tecnológicos. Lo aprendido se vuelve obsoleto en un corto período de tiempo.

Infancia

Cuerpo dependiente, heterónomo, carente y vulnerable. Relación asimétrica con el adulto.

Nueva configuración de la sociedad

Desaparición de la infancia.

Colapso de la jerarquía de la infancia. Pérdida de asimetría frente al adulto.

Mundo Adulto

El adulto se autogobernaba y tenía autoridad indiscutible frente al niño.

Relación equivalente con el niño. Incapacidad de decir “no” de forma legítima.

Legitimidad de la autoridad del maestro

Legitimidad de origen.

Legitimidad de ejercicio.

Para cerrar este trabajo se presentará una cita de Charles Wright Mills un sociólogo estadounidense que en 1959 dijo: “cada individuo vive de una generación a la siguiente; y, sin embargo, contribuye minuciosamente a la conformación de la sociedad y al curso de su historia”. Los cambios que atraviesan las sociedades a través del tiempo no pueden ser vistos separadamente de las acciones y decisiones que toman los individuos que las viven.


Bibliografía

  1. Martínez Boom, A. (2016), Maestro, función docente y escolarización en Colombia. Propuesta Educativa, 1 (45) 34-49.
  2. Mead, M. (2002). Cultura y compromiso. Barcelona: Gedisa
  3. Narodowski, M. (2016) Un mundo sin adultos. Buenos Aires; DEBATE
  4. Postman, Neil. (2011) The Disappearance of Childhood. New York: Vintage

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